Sintaxis

36 El complemento de régimen preposicional

36.10 Complementos de régimen con las preposiciones para, por, sobre y tras

36.10a La relación entre las nociones de ‘fin’ (término) y ‘finalidad’ (propósito) es sumamente estrecha, como se explica en el § 46.8. Además de introducir numerosos complementos circunstanciales de finalidad, que modifican a verbos de múltiples clases léxicas, la preposición para encabeza complementos seleccionados por algunas categorías, sin que ello implique que se pierda o se desvirtúe el significado de finalidad que la caracteriza. Para alterna con hacia en los complementos direccionales de algunos verbos de movimiento (girar, ir, partir, salir, virar, volver), como en ir para Barcelona, salir para su casa o en los textos siguientes:

Bien, bien, ¿vas para Guánica? (Rodríguez Juliá, Cruce); Sale para el exilio a principios de la semana entrante (Gallegos, D., Pasado); Vírate para allá (Ramos Escobar, Olor); Lo fui a buscar —dijo—, pero no quiere volver para el asilo (Dou, Luna).

Este concepto se interpreta figuradamente en ir para (los) cuarenta y cinco (años), estudiar para médico y en otros complementos formados con sustantivos de profesión u ocupación (§ 38.10e):

Ese tío va para alcalde. O para gobernador. O para presidente (Sierra Fabra, Regreso); Fue cuando estudiaba para perito agrícola en San Fernando (Collyer, Pájaros).

36.10b Introducen complementos de régimen encabezados por la preposición para, a veces en alternancia con otras preposiciones, un gran número de sustantivos, adjetivos y verbos. La mayor parte de ellos se circunscribe a las nociones de ‘capacidad’, ‘necesidad’, ‘suficiencia’ o ‘relevancia’, todas modales, pero otros giran en torno a los conceptos de ‘uso’, ‘utilidad’, ‘instrumento’, ‘recurso’ y otros próximos a estos. En los § 46.4i y ss. se desglosan estas nociones semánticas y se proporciona una relación parcial de los verbos, sustantivos y adjetivos que corresponden a cada una de ellas.

36.10c Rigen complementos construidos con la preposición por varios verbos que denotan tendencia o inclinación hacia algo, como votar (también con objeto directo en algunos países), apostar, decantarse, decidirse, inclinarse, interceder, optar, etc. El término de la preposición designa en estos casos la persona o la cosa a favor de la cual se realiza la acción:

Yo no he votado por ningún presidente ni votaré (Barnet, Gallego); Ya nadie apostaba por un desenlace de mano tendida (Sánchez, H., Héroe); Los que se decantaban por la claridad, sin duda la mayoría, hacían continuos progresos en esta dirección (Argullol, Razón).

36.10d Se asimilan a este último grupo de verbos otros que denotan la acción de pedir algo (orar, pedir, rezar), la de explicar algún comportamiento (disculparse, excusarse, justificarse), así como la de mostrar interés, anhelo o porfía en diversos grados (abogar, luchar, pelear, sacrificarse, suspirar):

Los tres te esperan, rezan por ti todas las noches (Morales, A., Verdad); A pesar de todo lo que he abogado por ti, creo que no saldrás de abajo (Herrera Luque, Casa); No le importa sacrificarse por llevar a cuestas el poder (ABC 16/1/1987).

En relación con este último grupo, véanse también los § 36.4t, 36.9j y 46.4d y ss.

36.10e Se construyen con la preposición por los verbos que expresan sustitución o trueque (cambiar, compensar, reemplazar, sustituir), como en sustituir una lámpara por otra:

Si pudiera me cambiaría por ti (Argüelles, Letanías); El dolor de cabeza se veía poco a poco sustituido por una aguda sensación de hambre (Martínez Reverte, Gálvez); La imagen de la rata fue inmediatamente reemplazada por el perfume de postres de manzana y tartas de ciruela (Kociancich, Maravilla).

Repárese en que la última oración tiene dos sentidos, ya que el segmento que encabeza por podría interpretarse como el complemento agente de una oración pasiva (cf. El perfume reemplazó la imagen), o bien como un complemento de régimen (Alguien reemplaza una cosa por otra). Introducen también complementos de régimen con la preposición por los verbos que denotan transacción, cuando el complemento designa el pago de alguna mercancía (adquirir, alquilar, ceder, comprar, dar, vender), como en ¿Me lo das por diez euros? o Se lo alquilaron por cien dólares. El concepto de ‘sustitución’ se extiende al de ‘juicio’ en tomar una cosa por otra.

36.10f Admiten asimismo la preposición por los complementos de muchos verbos transitivos que denotan contacto (agarrar, coger, sostener, sujetar, tomar), de forma que el término de la preposición designa lo que se agarra o se manipula, como en sujetar a alguien por la solapa, coger el rábano por las hojas, agarrar la espada por la empuñadura. Estos complementos alternan a veces con de, como ya se señaló en el § 36.3m.

36.10g Se construyen igualmente con por los complementos de algunos verbos que expresan ordenación (ordenar los libros por tamaños, clasificar las fichas por el apellido, formar a los soldados por escuadrones):

Reparó que, en una mesa de pino, había montones de papeles ordenados por fechas, lugares, temas y personas (Padilla, H., Jardín); Pareciera además que nuestras tribulaciones se pueden clasificar por épocas; por circunstancias culturales que las van poniendo de moda (Puga, Silencio).

Cabe agregar otros que se refieren a las características distintivas de las cosas o las personas, como caracterizar(se), descollar, destacar(se), diferenciar(se) y distinguir(se), a menudo en alternancia con en.

36.10h Seleccionan por muchos verbos de reacción afectiva, a veces en alternancia con de: alegrarse, desesperarse, inquietarse, interesarse, irritarse, llorar, etc. El término de la preposición designa en estos casos la causa de la reacción experimentada, como en Se irrita por pequeñeces con él, no le tiene paciencia (Bayly, Mujer) o en Ella se interesaba por saber de su salud (Aguilera Malta, Pelota). Entre los sustantivos que denotan emociones, son muy numerosos los relacionados con este grupo:

afán, alarma, amor, ansia, atracción, aversión, congoja, curiosidad, entusiasmo, esfuerzo, estima, extrañeza, fascinación, fijación, horror, ilusión, inquietud, interés, llanto, pasión, pena, preocupación, respeto, simpatía, tristeza, etc.

Entre los adjetivos que pertenecen al mismo grupo y pueden seleccionar la preposición por, están obsesionado y loco. Eligen también por, en alternancia con de, los adjetivos triste, contento y ávido: Siempre estamos ávidos por la posesión de cosas (Marafioti, Significantes). El verbo morirse se construye con por cuando significa ‘desear vivamente’, como en Llámate a Charly, Nata, seguro que se muere por oírte (Gamboa, Páginas); el verbo preguntar lo hace también en su acepción de ‘interesarse’, como en Siempre me había preguntado por el tío Juan Gabriel (García Hortelano, Cuento).

36.10i En otros casos, los complementos preposicionales introducidos por la preposición por presentan límites difusos con los adjuntos, o bien se integran plenamente en el grupo de estos. Así, se construyen con por muchos verbos de movimiento no direccional, como caminar, circular, correr, deambular, errar, merodear, pasear, vagar, etc. El complemento preposicional designa aquí el lugar (físico o figurado) dentro del cual se realizan esas acciones, como en El domingo fui al cine y deambulé por el centro en busca de conocidos (Conget, Mujeres). Aun así, el hecho de que estos complementos sean característicos de los verbos de movimiento —se dice, en efecto, Paseaba por la alameda, pero resulta extraño Leía por la alameda— introduce una restricción similar a las que acotan los verbos de movimiento direccional. No son, en cambio, complementos de régimen, sino circunstanciales, los que modifican a muchos verbos de acción en la interpretación de lugar indeterminado incluido dentro de otro más amplio, como en Comeremos por ahí; Me lo encontré por el parque.

36.10j El término de la preposición por designa algún lugar de tránsito en Subió al piso superior por la escalera principal o en Puedes venir por la carretera de circunvalación. El verbo pasar y los sustantivos paso y travesía denotan la noción de ‘tránsito’ y se construyen también con por: Cualquiera sabe lo que pasaría por su cabeza en aquellos minutos (Buero, Detonación). Ocurre lo mismo con algunos verbos que se asocian con el concepto de ‘dispersión’, como derramar(se), desparramar(se), esparcir(se), repartir(se) o sembrar:

Pétalos rojos, anaranjados y amarillos están desparramados por el suelo (Santiago, Sueño); Una insólita siembra de pájaros y hojas se esparcía por el pueblo como despojos inocentes de una cruel y vandálica batalla (Llamazares, Lluvia); Braulia preparaba unos emplastos con esas hojas, que estaban sembradas por todas partes (Montero, M., Capitán).

36.10k También son imprecisos los límites entre los complementos circunstanciales y los de régimen en los casos en los que por significa ‘a través de’. Manifiestan este sentido varios verbos que denotan movimiento hacia el interior de un lugar, como colarse, entrar, introducir(se), meter(se), penetrar, o bien hacia el exterior de algo (extraer, sacar, salir), como en El ladrón entró en la casa por la chimenea. Este significado se extiende a otros verbos de acción, como en respirar por la nariz, mirar por un agujero y otros análogos:

El Kim se cuela por la pequeña puerta y sube silenciosamente la escalera angosta y alfombrada (Marsé, Embrujo); Dobló hacia la derecha y el coche entró por un estrecho camino de barro (Onetti, Viento); A cada rato hay que chuparse el dedo y sacarlo por la ventana a ver por dónde sopla el aire (Fuentes, Cristóbal); Se levantaba sin decir una palabra y salía por la puerta contraria (Ferré, Batalla).

36.10l La interpretación de por con el sentido de ‘a través de’ o ‘a partir de’ se aproxima a la instrumental con los verbos que denotan juicio (juzgar a alguien por sus obras) o inferencia (calcular, deducir, inferir). El significado de por está más cerca del complemento agente con diversos verbos que seleccionan complementos de información (enterarse, guiarse, informarse, saber), como en Se guía por su olfato. Se construyen también con por otros complementos que designan el canal por el que se difunde o se percibe alguna información (Me enteré por la radio; La llamó por teléfono), así como el medio por el que se transporta algo (enviar la mercancía por barco, viajar por avión). Como antes, los límites entre los complementos de régimen y los adjuntos son también imprecisos en estos casos. Para el complemento agente de los participios véase el § 27.8o.

36.10m Los complementos que introduce la preposición sobre designan la superficie o la parte superior de alguna cosa, por lo que pueden modificar opcionalmente, como complementos circunstanciales, cualquier predicado que denote alguna acción que pueda llevarse a cabo en tales condiciones. Se discute si introducen complementos regidos los pocos verbos que expresan acciones que requieren habitualmente una superficie (deslizarse, resbalar) y que se construyen con mucha frecuencia con esa preposición, en alternancia con en y con por. Al igual que los demás complementos de ubicación, los encabezados por sobre son apropiados para designar también el destino de algún movimiento, como sucede con muchos verbos transitivos e intransitivos: abalanzarse, abatirse, arrojar(se), caer(se), echar, encaramarse, lanzar(se), marchar, proyectar y subirse (varios de ellos en alternancia con a, contra u otras preposiciones):

El cadáver al caer sobre la tierra fue succionado por esta (Flores, Siguamonta); Con alada agilidad se encaramó sobre los hombros de su hermano (Delibes, Madera); Se lanzó sobre mí y me dio un violento empujón que me tiró contra la pared (Zarraluki, Historia).

36.10n Aceptan el mismo régimen los sustantivos arancel, impacto, impuesto, marcha (marcha sobre Roma), recargo, tasa y otros que se mencionaron en los § 36.5f y 36.6a-n. La preposición sobre es también aceptada, a veces en alternancia con entre36.9l), por algunos verbos que denotan prominencia (descollar, destacar, triunfar):

Entre un revoltijo de ideas, la de Eloísa se destaca sobre el fondo de la noche (Chávez, Batallador); Debe ser esa una de las raras veces en que el arte haya triunfado sobre la policía (Adoum, Ciudad).

Seleccionan asimismo la preposición sobre los predicados que hacen referencia a la noción de giro, como girar, voltear, dar vueltas, volver, este último más frecuentemente en su sentido figurado, como en volver sobre un asunto.

36.10ñ Del significado originariamente locativo de la preposición sobre se pasa con frecuencia al sentido figurado en el que se denota materia, asunto, ámbito o contenido. Este significado es el que se percibe en los complementos de régimen de muchos verbos de comunicación, algunas veces en alternancia con de o con otras preposiciones (advertir, aleccionar, conversar, debatir, hablar, opinar, platicar, preguntar, pronunciarse), pensamiento o creencia (dudar, engañarse, meditar, pensar, reflexionar), diversas tareas inquisitivas o creativas (escribir, indagar, investigar) y otras acciones similares relativas a asuntos, materias o informaciones:

Luego conversaremos sobre eso; no sé si te producirá alguna sorpresa (Liendo, Platos); En verdad, no había nada más que hablar sobre Larissa (Mutis, Maqroll); A la única persona que permitió opinar sobre la educación de Miguel fue a Clara (Allende, Casa); Silicio salió al patio a respirar y, reflexionando sobre su pasado, vio la línea que lo llevaba hasta ese día (Gamboa, Páginas); Aquella mujer era capaz de hacerle dudar sobre lo que era literario y lo que era simplemente chusco (Millás, Mujeres).

36.10o Como cabe esperar, se extienden los complementos de régimen que encabeza la preposición sobre a los sustantivos derivados de los anteriores verbos (conversación, debate, duda, investigación, meditación, pensamiento, pregunta, pronunciamiento), pero también a numerosos sustantivos asociados con ellos (incógnita, incertidumbre). Destacan especialmente los que designan diversos tipos de textos (artículo, decreto, drama, escrito, ley, libro, norma, novela, poema, tratado) y muchos otros que se caracterizan por asociarse con contenidos temáticos, ya que constituyen objetos de información o de representación, como conferencia, discurso, documental, óleo, película, teoría y muchos más:

¿Tienen también leyes sobre el vino? (Torbado, Peregrino); Se sintió molesta, avergonzada de su último pensamiento sobre el cuadro (Aguilera, N., Caricia); Tuvo la impresión de haber compuesto el más hermoso poema sobre nubes que se pudiera imaginar (Landero, Juegos); Varias veces al año se celebraban congresos, simposios o conferencias sobre los números primos (Donoso, Elefantes); ¿A qué tenía que venir con semejante teoría sobre la desfloración incruenta? (Cabrera Infante, Habana); […] por culpa de Buñuel y sus películas sobre esta gente en España (Bryce Echenique, Martín Romaña).

Cabe añadir los sustantivos acuerdo, compromiso, negociación, pacto y otros análogos cuando introducen la materia a la que afectan esas nociones.

36.10p Seleccionan asimismo la preposición sobre varios sustantivos que denotan superioridad (predominio, preferencia, prioridad, superioridad, supremacía, triunfo, ventaja, etc.):

En los niños está el futuro de la patria y hay que velar por ellos con preferencia sobre nosotros, que ya pertenecemos al pasado (Aguilar Camín, Golfo); Le daba prioridad sobre los demás clientes (Andrade, Dios); Ellos son ilustrativos para conocer los medios y la forma en que el cabecilla napolitano obtuvo la supremacía sobre los miembros de su banda (Alonso, F., Imperio); En verdad, había algo de mágico en su triunfo sobre el candidato de la derecha (García, A., Mundo); ¡Tan pequeños los pájaros y con tanta ventaja sobre nosotros! (Belli, Mujer).

Se considera más adecuado el uso de la preposición a que el de la preposición sobre, que se documenta ocasionalmente, en los complementos de preferir (por tanto, Lo prefiero a cualquier otro, en lugar de Lo prefiero sobre cualquier otro). Se emplea también con la preposición sobre el verbo predominar. Alternan, en cambio, imponerse a alguien e imponerse sobre alguien.

36.10q Se construyen con sobre varios verbos que manifiestan los conceptos de ‘presión’, ‘atracción’ e ‘influencia’, como caer, gravitar, incidir, influir, pesar o presionar, entre otros:

Es una característica de la especie humana tratar de influir sobre los demás (Salvador Hoy 6/1/1997); Y veo también que esta es la maldición que pesa sobre todos los humanos (Moix, Sueño); El cielo de Buenos Aires, bajo y oscuro, presionaba sobre los techos de las casas (Martínez, Perón).

Aunque este régimen se extiende a veces a los verbos basarse y fundamentarse, se prefiere en ambos casos la preposición en36.4q).

36.10r La preposición tras suele encabezar complementos circunstanciales y complementos argumentales locativos, pero no suele introducir complementos de régimen, con la posible excepción de algunos verbos que denotan protección, como escudarse y parapetarse, en alternancia con en:

Al sentirse libre Palacios, saltando chistosamente, se escudó tras su auto (Chávez, Batallador); El director se parapetó tras su pupitre, mientras su mano exploraba el muro buscando un timbre de alarma (Ribeyro, Geniecillos).

Se considera locución verbal andar tras alguien o algo (también con ir), con el significado de ‘perseguirlo’, ‘buscarlo con diligencia’, como en Sin embargo, la policía anda tras la pista de un grupo que todavía actúa en ese lugar (Souza, Mentira).

 

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