Sintaxis

29 La preposición y el grupo preposicional

29.2 Inventario de preposiciones. Criterios de delimitación

29.2a No suelen coincidir las gramáticas en el inventario de las preposiciones del español, ya que algunas de ellas son de escaso uso, otras han ingresado no hace mucho en este paradigma y otras, finalmente, poseen solo algunas de las propiedades que caracterizan dicha clase de palabras. En la actualidad, suele entenderse que las preposiciones del español son las siguientes: a, ante, bajo, cabe, con, contra, de, desde, durante, en, entre, hacia, hasta, mediante, para, por, según, sin, so, sobre, tras, versus y vía. Esta lista merece, no obstante, algunas precisiones que se harán a lo largo de esta sección.

29.2b Las preposiciones cabe ‘junto a’ y so ‘bajo’ figuran en esta relación, pero se sienten ya desusadas. La primera se utilizaba con cierta frecuencia en la lengua medieval:

Era guarda mayor de los montes de Medina del Campo y alcaide del Abrojo, cabe Valladolid (Cabrera Córdoba, Relación); Le hice sentar cabe mí en mi lecho (Mena, F., Traducción).

En ocasiones se documenta en textos más recientes, a menudo poéticos, pero casi ha desaparecido del español común de hoy:

Vio el Dios viril en mármol cincelado / cabe la fresca viña de Corinto (Rubén Darío, Prosas); Cabe la corriente / del viejo Betis su real nobleza / guardada fue, entre paños recamados (Villalón, F., Toriada); A pesar de tener cabe sí un brasero con lumbre, Ramiro sentía colarse por las rendijas ese estremecimiento glacial de la atmósfera que anuncia la nevasca (Larreta, E., Gloria).

29.2c La preposición so también era habitual en la lengua antigua, en la que se usaba con el sentido de ‘bajo’, como en So la tabla está caída (Torres Naharro, Tinellaria). Se documenta de modo muy ocasional en textos literarios modernos, casi siempre con complementos de lugar: Todos los monarcas se habían dignado jurar personalmente los Fueros so el árbol de Guernica (Navarro Villoslada, Doña Toda). En la actualidad es de uso común como parte de la locución so pena de, cuyo término hace referencia por lo general a algún castigo o a algún riesgo:

Durante diez años estuvo vigente la muerte civil del partido y de sus líderes, a quienes ni siquiera se podía mencionar, so pena de represalias severísimas (Universal [Ven.] 12/9/1996); El matrimonio es un equipo en el que se debe remar parejo so pena de que el barco pierda su rumbo (Cuauhtémoc, Grito).

A este grupo reducido de locuciones pertenece so pretexto de ‘con el pretexto de’, y también, con similar significado a esta última, so color de y so capa de, como en Duermen en ellas so capa de su cercano parentesco (Morón, Gallo). La preposición so se mantiene en el asturiano actual (so la cama) y está presente en algunos compuestos —casi siempre topónimos—, como Somonte.

29.2d La preposición hasta se distingue de su adverbio homónimo (‘incluso’). Puede introducir pronombres personales con caso oblicuo (Llegaron hasta mí), mientras que el adverbio focaliza segmentos pertenecientes a muy diversas categorías (Hasta duerme de pie, hasta sin dinero, hasta orgulloso de ello), sin excluir los grupos nominales y los pronombres personales (hasta yo). Las construcciones del tipo Hasta él se dio cuenta, en las que hasta es adverbio (§ 30.8ñ y 40.8k), se analizan en los § 33.2m y ss. Existen otras construcciones en las que resulta más conflictiva la oposición entre la preposición hasta y el adverbio homónimo. Se analizarán en el § 29.8j.

29.2e La preposición según significa aproximadamente ‘conforme a’ o ‘de acuerdo con’, como en según ella, según la ley, el evangelio según San Marcos o como en Según nuestro amigo, no hay más que dos filosofías (Azorín, Memorias), pero también ‘en función de’ o ‘dependiendo de’, como en según quién venga. Se distingue del adverbio relativo según22.7f), que introduce oraciones de verbo en forma personal: según le parezca a ella (‘del modo que le parezca a ella’). En su uso preposicional, según posee varios rasgos peculiares que constituyen restos de su origen latino (lat. secundum, derivado de sequi ‘seguir’). En efecto, según es la única preposición tónica del español. En según Lucía se reconocen dos grupos tónicos (uno con acento en la sílaba -gún y otro en la sílaba -cí-), mientras que en para Lucía se reconoce uno solo. Por otra parte, según rechaza el caso oblicuo (según tú, no *según ti), a diferencia de lo que es normal entre las preposiciones. Al comienzo de este apartado se analizó según como preposición en según la ley. Debe observarse, no obstante, que no todos los gramáticos coinciden en este análisis. En los apartados siguientes se resumirán las opciones que se presentan.

29.2f Entienden algunos gramáticos que según es conjunción en según la ley, de forma que se sobrentiende algún verbo: según {afirma ~ dice ~ sentencia} la ley. Este análisis presenta el inconveniente de que introduce un tipo de elipsis extraño en el sistema gramatical del español, ya que la identificación del elemento elidido está restringida léxicamente y no se recupera a partir del discurso previo. Por otra parte, el verbo del que se habla no se elide cuando según se construye, como sucede con otras preposiciones, con interrogativas indirectas, como en según quién sea enviado, ni cuando encabeza relativas especificativas, como en Tengo firmado un convenio con mis primos según el cual me comprometo a entregarles cuatro quintas partes de la herencia (Ibargüengoitia, Crímenes). Debe concederse, no obstante, que es peculiar el estatus de según entre las preposiciones, ya que estas partículas muestran generalmente alternancias entre grupos nominales (sin la ayuda) y subordinadas sustantivas (sin que llegue la ayuda). La preposición según rechaza estas últimas (según la ley ~ *según que dice la ley) y además da lugar a secuencias formadas con otra partícula (el adverbio relativo según: § 22.7f), sin que este cambio sintáctico tenga en apariencia consecuencias para el significado. Se ha observado que algunas preposiciones y locuciones preposicionales admiten grupos nominales, pero rechazan las subordinadas sustantivas, como puede verse en con arreglo {al texto ~ *a que dice el texto ~ a lo que dice el texto}, pero ninguna admite alternancias con oraciones no subordinadas de verbo en forma personal: *con arreglo a dice el texto.

29.2g La preposición según comparte con el verbo depender la posibilidad de admitir interrogativas encubiertas (§ 43.8c y ss.), es decir, grupos nominales que se interpretan como oraciones interrogativas indirectas. Así, el término de la preposición según que se subraya en Según el periódico que leas, las informaciones pueden ser distintas constituye un grupo nominal con subordinada relativa en subjuntivo. Este grupo nominal no es análogo al que se marca en Según nuestro invitado, la prensa no es independiente del poder político. En el primer caso —pero no en el segundo—, según equivale a ‘en función de’ y también a ‘dependiendo de’. Admite, además, paráfrasis con interrogativas indirectas: Según qué periódico leas, … al igual que depender. Este verbo se caracteriza también por seleccionar construcciones disyuntivas (§ 43.7e), como en Depende de que yo cumpla o no sus caprichos (Landero, Juegos). La preposición según comparte asimismo esta propiedad, tanto si la conjunción disyuntiva o une grupos nominales como si enlaza oraciones u otros grupos sintácticos:

Endereza las orejas y mira con expresión diferente, según que las palabras sean acariciantes o amenazadoras (Nueva Provincia 21/7/1997); El mismo club declara diferentes cantidades, según que le interese hacer constar que ha hecho un fichaje barato o que ha conseguido los servicios de un gran jugador (País [Esp.] 2/10/1985); Las sentencias variaban, según que el reo hubiese reconocido o no su culpa y hubiera pedido perdón por ella (Vizcaíno Casas, Isabel).

En esta obra se mantendrá el lugar que corresponde tradicionalmente a según entre las preposiciones, sin negar —como se ha explicado— que se asimila a los adverbios relativos en ciertos contextos. Cabe añadir que según se comporta también como adverbio cuando se usa en ciertas respuestas características del habla conversacional. A la pregunta ¿Vendrás a la fiesta? se puede responder Según —en alternancia con la locución adverbial Según y cómo—, pero también Depende.

29.2h Las preposiciones durante y mediante eran, en su origen, los participios de presente de durar y mediar respectivamente, y podían preceder o seguir a su sujeto, con el que concordaban en número:

Nin contrasta ala su linpieza el manjar dela criatura que, durantes los nueue meses, prende dela superfluydat delos contrarios humores (Rodríguez Padrón, Triunfo); Todas las formas se produzen de Dios, mediantes otras virtudes naturales (Torre, A., Visión); Conosçiendo que la bienaventurança virtuosa esté en la religión e conçepçión de aquella, reconosçiendo, aquéllas mediantes, alcança el su virtuoso cumplimiento (Villena, Eneida).

El uso participial de mediante, por tanto concordado, se documenta de forma ocasional en textos de los dos últimos siglos, sobre todo en fórmulas coordinadas no muy alejadas de la actual Dios mediante:

Pero esto se compondrá, Dios y un empréstito mediantes (Larra, Fígaro); Dios y la justicia mediantes han de coger a los bandidos, en aquel puerto (Carrasquilla, Marquesa).

29.2i El origen de la expresión Dios mediante, que el DRAE recoge como fórmula lexicalizada, es una construcción absoluta que podría parafrasearse como ‘mediando Dios’ y —más libremente— como ‘si Dios lo quiere’, como en Aquí vendremos juntos, Dios mediante, dentro de unos pocos días a recibirlo (Uslar Pietri, Oficio). Esta pauta es ya rara en los textos actuales con otros sustantivos, pero se documenta en ocasiones: Es muy difícil, a estas alturas, sin sentimentalismos mediantes, pensar en re-inventarla (Nacional 6/2/1997). A pesar de ser trisílabas, mediante y durante no forman hoy por sí solas grupo tónico (en lo que se diferencian de según, como se ha explicado), de modo que en este sentido se asemejan a las demás preposiciones. Se analizan otros aspectos del uso participial de durante y mediante en los § 7.11d y ss. y 27.8e. Sobre el término de la preposición durante, véanse los § 29.6k, l. Acerca de la naturaleza durativa del tipo de evento al que modifica su grupo preposicional, como en {permanecer ~ *llegar} durante cierto tiempo, véanse los § 23.3o y ss. y 39.2b.

29.2j Cuando significa ‘en favor de’, pro suele considerarse preposición, pero se ha observado que está más cerca de los llamados prefijos separables10.2f, 10.4g y ss.). Rechaza, en efecto, los grupos nominales definidos. Así, a diferencia de manifestaciones {a favor de ~ en pro de} la defensa de los animales, la gramática rechaza *pro la defensa de los animales. En la escritura se registra la grafía unitaria en casos como provida o proamnistía, pero es más habitual la forma exenta:

Pero antes de que eso ocurra, las fuerzas pro reelección quieren estar seguras de obtener los votos necesarios (Clarín 15/1/1997); Formaron parte de la comisión pro amnistía en Vizcaya (País [Esp.] 21/6/1977); Están enviando duros mensajes al movimiento pro independencia taiwanés (Mundo [Esp.] 15/8/1995).

Se registran también variantes de estas expresiones con guion intermedio (pro-reelección, pro-amnistía, pro-vida), que no se recomiendan. Pro se antepone asimismo a grupos nominales escuetos (§ 14.1k):

Una serie de grupos pro defensa de los animales han denunciado las creaciones de Hirst como innecesariamente crueles (Vanguardia [Esp.] 30/11/1995); Se conoce de la lucha emprendida por un grupo de mujeres, […] al unirse primero a protestas públicas contra una reforma a la ley electoral y luego movimientos pro garantías electorales (García Quesada, Participación).

Cuando precede a un adjetivo, el comportamiento gramatical de pro es el de un prefijo (§ 10.11h, i). Forma, pues, una sola palabra con el adjetivo que le sigue: Algunos congresistas progubernamentales, señaló la fuente, podrían proponer una Ley de Amnistía (Proceso [Méx.] 29/12/1996).

29.2k La preposición latina versus ‘hacia’ se ha reintroducido recientemente en español a través del inglés. Equivale hoy a contra en unos contextos y a frente a en otros. Si bien no se considera incorrecta, en ambos casos se tienen por más adecuadas estas otras partículas. Casi todos los usos documentados se atestiguan en el lenguaje científico, el periodístico —especialmente el deportivo—, el legal y en otras variedades asimismo especializadas de la lengua actual:

Esa perspectiva paternalista e idealizadora ha puesto en juego toda una serie de odiosas dicotomías: habla popular versus lengua de cultura, lenguas primitivas versus lenguas avanzadas, sentimiento versus razón, y así sucesivamente (Ninyoles, Idiomas); La idea de sucesión de no equilibrios, versus la idea de desequilibrios, es, en definitiva, la versión del desarrollo sobre la decadencia (Nitti, Comunicación); No hay esa especie de ley […] sino algo como una dialéctica práctica constante de fuer zas opuestas (civilización versus barbarie) en juego dramático (Zum, Narrativa).

Se usa con relativa frecuencia, en los niveles de lengua que se han mencionado, la abreviatura vs.:

El partido [...] en dicha fecha será entre MetroStars vs. Chicago Fire (Sur [Col.] 30/4/2004); Gramsci glosa el postulado en fórmulas menos drásticas; fuerza vs. consenso; coerción vs. persuasión; Estado vs. Iglesia; sociedad política vs. sociedad civil; política vs. moral; derecho vs. libertad; orden vs. disciplina (Aguirre Beltrán, Antropología).

29.2l La preposición vía introduce, en su sentido estrictamente físico, el lugar por el que se pasa o en que se hace escala en un desplazamiento:

Mi padre me había enviado dinero para continuar viaje a París, vía Nueva York (Bryce Echenique, Martín Romaña); ¿Usted va a Trípoli vía París? (Soriano, León); Tomó un vuelo [...] con escala en Frankfurt, Alemania, y retornó el ocho, vía Miami (Vistazo 20/3/1997).

En todas estas secuencias vía equivale a por, en uno de los usos de esta preposición (§ 29.6c y 29.8o), concretamente en el que introduce el trayecto que corresponde a algún movimiento: ir de Madrid a Varsovia {por ~ vía} Frankfurt. El uso como preposición del sustantivo vía es el resultado de un proceso de gramaticalización, ya que el significado que expresa permanece en forma más abstracta en su uso preposicional. El origen nominal de la preposición se percibe con claridad en ciertos avisos de carreteras, como México-Guadalajara, vía corta. En los § 29.9j, k se examinará el proceso de gramaticalización de camino, orilla y otros sustantivos similares que forman parte de locuciones preposicionales.

29.2m En la lengua de la política, la jurisprudencia, el periodismo y en otras manifestaciones escritas propias de los registros formales, se usa hoy vía como equivalente de mediante o de a través de, por tanto, con complementos nominales que no designan únicamente lugares. Aunque no se considera incorrecto este uso, representado en los siguientes ejemplos, se tienen por más apropiadas las otras partículas mencionadas:

La política se expresa principalmente en los procesos de toma de decisiones y determinaciones sociales que se imponen a la sociedad vía el consenso (Coss, Nación); Pueden cubrir sus necesidades básicas y cuentan con un apreciable excedente financiero disponible, o pueden acceder a él vía el crédito (Ortega Valcárcel, Horizontes); Representa aquello a lo que normalmente se hace referencia al hablar de teorización, vía el uso de la lógica inductiva y deductiva como método (Lucas, Sociología).

Se está generalizando asimismo la construcción «por vía + adjetivo» en casi todos los registros mencionados, como en un rescate por vía aérea, en lugar de un rescate vía aérea. En el español informal del Perú y de otras áreas se ha observado en los últimos años el uso preposicional de los sustantivos tipo y plan (de) con el sentido de ‘hacia’. Se trata de construcciones como Estaremos llegando tipo tres de la tarde o Nos vemos plan de las cuatro, que no han pasado a los registros formales. Para el uso de cosa de, véase el § 29.9u.

29.2n Se asimila indirectamente a las preposiciones el adverbio relativo donde cuando se emplea en el sentido de ‘en casa de’ o ‘en el establecimiento de’, como en Pirulo bebía un pisco donde María (Ribeyro, Geniecillos), o bien cuando adquiere significados análogos en contextos en los que se expresa el término de un movimiento, como en Si tuvieras una hermana, no iría corriendo donde ella a llorarle mis penas y a hablar mal de ti. No sería tan mezquino. Pero tú sí corres donde Gonzalo (Bayly, Mujer). Estos usos de donde, frecuentes en el registro coloquial, así como en el habla popular de muchos países, se analizan también en los § 22.8u, y. Sobre expresiones similares, como cuando la guerra, véanse los § 22.9s, t. Se ha aducido como argumento a favor de su naturaleza preposicional el hecho de que donde puede introducir pronombres en caso oblicuo en los niveles de lengua en los que se emplea:

¡Vieja! ¡Vieja! Levántese y venga donde mí (Ramos-Perea, Obsesión); Y la pobre, ¿sabe lo que hizo?, pues venir donde mí, la muy boba, a preguntarme qué había sucedido (Vergés, Cenizas).

Son usos que se documentan ocasionalmente y que no han pasado a la lengua culta. Sobre la alternancia entre como y de en expresiones del tipo Este cuarto se usa {como ~ de} almacén y otras semejantes, en las que como puede asimilarse al grupo de las preposiciones, véanse los § 22.10, 38.10f y ss. y 40.10e.

29.2ñ Si bien las partículas excepto, menos y salvo31.12) se han considerado a veces preposiciones, no suelen clasificarse actualmente como tales, y se asimilan más bien a las conjunciones por las razones que se exponen en los apartados a los que se remite. Se clasifican como adverbios o locuciones adverbiales incluso40.8), sin embargo y no obstante30.12). Esta última se asemeja a mediante y durante en que se origina en una construcción absoluta. De hecho, todavía puede analizarse como tal la expresión subrayada en Y allí se desencadenó sobre nosotros un temporal que justifica el fracaso de los persas, no obstante su poderío temible (Mujica Lainez, Escarabajo), aun cuando no obstante alterna aquí con la locución preposicional a pesar de. Sin embargo se asimila a otras locuciones adverbiales en el hecho de que puede construirse con complemento preposicional:

Sus mayores logros se dirigen en esa dirección, sin embargo de que la balanza del intercambio no le favorece al país en nada (Tiempos 14/12/1996); La circunstancia, sin embargo de que la experiencia sensible como tal consista en un acto subjetivo accesible en exclusiva al que lo ejecuta, confiere a esa materialidad un carácter sui géneris (Pinillos, Psicología).

El resultado es análogo a una locución preposicional. La doble segmentación que se obtiene —es decir, [sin embargo] [de que…] o bien [sin embargo de] [que…]— se extiende a otras partículas, como se explica en los § 29.3g y 30.15-17. Existe una relación estrecha entre preposiciones y conjunciones copulativas. Como se explica en los § 33.7g y ss., la preposición con tiene propiedades conjuntivas en oraciones como Con Marta fuimos al cine, equivalente a ‘Marta y yo fuimos al cine’, característica de algunos países americanos.

Información adicional

En relación con este capítulo, las siguientes entradas del Glosario de términos gramaticales podrían ser de su interés:
conjunción modal, gramaticalización

 

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