Sintaxis

30 El adverbio y el grupo adverbial

30.12 Conectores discursivos adverbiales (I). Características fundamentales. Clases sintácticas

30.12a Como se explicó en el § 1.9z, el concepto de conector discursivo (también marcador u operador discursivo o del discurso) no constituye una clase sintáctica de palabras análoga a verbo, conjunción o adverbio, sino un grupo establecido con criterios textuales. La mayor parte de los conectores discursivos son adverbios o locuciones adverbiales, pero algunos son conjunciones, preposiciones, interjecciones o bien locuciones formadas con todas estas clases de palabras. El hecho de que el grupo más numeroso de conectores discursivos sea el que componen las locuciones adverbiales justifica que se les concedan dos secciones de este capítulo.

30.12b Se adelantó en el § 1.9z que en la tradición gramatical era frecuente analizar como conjunciones muchos de estos conectores, lo que llevaba —se piensa hoy— a mezclar los elementos de un paradigma estrictamente sintáctico (conjunción, adverbio, etc.) con los que componen diversos grupos de partículas establecidos con criterios discursivos o textuales. Así, el adverbio consiguientemente se caracteriza por presentar la información que introduce como consecuencia de la que aporta el segmento que lo precede: El tiro era, así, más corto, el blanco más reposado y, consiguientemente, la pieza resultaba más segura (Delibes, Camino). Este adverbio aparece analizado como conjunción en no pocas descripciones gramaticales clásicas, al igual que empero, sin embargo y otras expresiones similares que dan lugar a vínculos argumentativos entre fragmentos textuales. Cuando se examinan con atención sus propiedades sintácticas, se comprueba, sin embargo, que en realidad no corresponden a las conjunciones, sino a la clase de los adverbios que se comportan como conectores discursivos. Así pues, en cuanto que el concepto de ‘conector’ es discursivo o textual, los conectores discursivos pueden ser conjunciones coordinantes o subordinantes, pero también adverbios, interjecciones o voces que pertenezcan a otros paradigmas.

30.12c Si se repara en las expresiones además, encima, por si fuera poco y sobre construidas con infinitivo, como en Pensaba que, sobre ser rígida la muerte, los vivos la adornábamos con un lujo de atributos lúgubres excesivos (Delibes, Sombra), se comprobará que las dos primeras son adverbios, la tercera es una fórmula asimilable a las locuciones adverbiales, y la última es una preposición (§ 29.8v y ss.). Las cuatro pertenecen al mismo grupo (§ 30.13a) si se consideran desde el punto de vista de su contribución al discurso, pero a grupos diferentes si se caracterizan sintácticamente. Existen otros casos similares. A la vez que se reconoce en la gramática cierta tendencia a asociar determinados contenidos abstractos con formas de expresión particulares, se sabe que existen numerosas asimetrías en esas correlaciones. Así, los contenidos adversativos, concesivos y condicionales suelen ser expresados sintácticamente mediante conjunciones subordinantes, pero también a través de adverbios o locuciones adverbiales. No hay, por tanto, contradicción en el hecho de que una locución adverbial exprese contenidos adversativos (sin embargo), concesivos (con todo) o condicionales (en tal caso).

30.12d Las conjunciones subordinantes pueden determinar las propiedades formales de las oraciones que introducen, al igual que el modo o el tiempo verbal. Los conectores o marcadores del discurso no suelen poseer, en cambio, esa capacidad. En el § 31.1s se explica que las conjunciones no aparecen en posición final de oración o de período, frente a lo que se permite con muchos conectores discursivos adverbiales. No exigen, por otra parte, ir seguidas de pausa en posición preoracional, de nuevo a diferencia de lo que suele ser habitual en muchos adverbios que establecen conexiones textuales. Estas diferencias, estrictamente sintácticas, dan lugar a contrastes como Así pues, la reacción resultó totalmente inesperada ~ *Puesto que, la reacción resultó totalmente inesperada. Nótese, en el mismo sentido, que combinaciones como pero, no obstante… serían absurdas si no obstante fuera conjunción adversativa, pero son esperables si es locución adverbial: Hubo luchas parciales; pero, no obstante, la dispersión del pueblo fue completa (Galdós, Fontana). Se obtendría el mismo resultado si se hubiera usado aun así en lugar de no obstante.

30.12e Las conjunciones se diferencian, por otra parte, de los adverbios en que pueden ir seguidas de incisos, pero no los requieren y no aparecen insertas entre ellos. No sería posible, por ejemplo, usar puesto que en lugar de así pues en La reacción resultó, así pues, totalmente inesperada. Tampoco se podría emplear así que en lugar de así pues tras pausa, como en Así pues, hemos de estar preparados ~ *Así que, hemos de estar preparados. A ello se añade que el segmento que encabezan algunas conjunciones puede ser foco de un adverbio (§ 40.5d, e), como en La molécula se origina solo mientras el microorganismo está creciendo (Rodríguez/Gavilanes, Tecnologías), donde la subordinada que encabeza mientras es el foco del adverbio solo. Los adverbios que funcionan como conectores discursivos suelen rechazar estas construcciones. Cabe agregar, en el mismo sentido, que no existe tampoco contradicción en el hecho de que ciertas partículas que suelen analizarse como interjecciones en algunos de sus usos (bueno, claro, hombre, oye, por fin, vale, vamos, etc.) puedan ser consideradas conectores o marcadores discursivos simultáneamente.

30.12f El estudio de los conectores o marcadores discursivos se ha desarrollado considerablemente en la pragmática contemporánea y en la lingüística del discurso o del texto, si bien existen notables diferencias entre los enfoques que se propugnan en las diversas escuelas que prosiguen en la actualidad estas investigaciones. Se ha prestado, en cambio, menos atención a la naturaleza estrictamente sintáctica de estas expresiones y, en concreto, al lugar que ocupa cada conector en las clases tradicionales de palabras. Sin dejar de constituir parte esencial de la pragmática (§ 1.1e), estos estudios son, a la vez, lexicológicos, en cuanto que proponen formas de organizar ciertas parcelas del léxico. Son también lexicográficos, puesto que introducen definiciones y caracterizaciones de un gran número de locuciones con la intención de mejorar la escueta información que sobre ellas suelen proporcionar los diccionarios. Al ser tan amplio el número de expresiones que pueden caracterizarse como conectores discursivos, su estudio afecta solo de forma tangencial a la gramática (en cuanto que no se considera objetivo de esta disciplina la descripción del léxico), pero es sumamente pertinente para analizar la estrecha relación que existe entre la gramática y el diccionario. En este capítulo no será posible considerar de manera pormenorizada el gran número de conectores discursivos de naturaleza adverbial que existen en español, por lo que tan solo se presentarán someramente los rasgos generales que permiten clasificarlos.

30.12g Se dan a veces diferencias sociolingüísticas entre los conectores discursivos. Así, dos conectores adverbiales pueden oponerse en función del registro lingüístico al que corresponden. Es el caso de total (grupo 9 en el § 30.13a), que pertenece a la lengua conversacional, como en […] total, que nada más colgar, he ido como una sonámbula al cuarto de baño y me he mirado al espejo (Belbel, Caricias), frente a en síntesis o en resumen, que son propios de los registros formales. Otros muchos conectores están separados por diferencias geográficas. así, la locución adverbial por cierto se usaba como adverbio de afirmación en el español clásico:

—Déjese de chocarrerías, señora Gallega —respondió el huésped—, y haga su hacienda, y no se entremeta con los mozos, que la moleré a palos. —¡Por cierto, sí! —replicó la Gallega— (Cervantes, Fregona).

Este uso pervive (en alternancia con desde luego o sin duda, entre otras expresiones similares) en gran parte de América, pero sobre todo en Chile, el Río de la Plata, México y América Central, como en Vendré el jueves, por cierto, y no quiero excusas, o en Cortés: Hazles saber a tus parientes que estás aquí por tu gusto. Moctezuma: Por cierto, por cierto (Fuentes, Ceremonias). En estas áreas, por cierto se emplea también como adverbio de énfasis tras una afirmación o una negación, como en Sí, por cierto o No, por cierto: Sí, por cierto: hasta acá llegó la fama de sus maravillosas virtudes (Sanchis, Retablo). En el español europeo y en algunas variantes del americano es hoy infrecuente el uso de por cierto como adverbio de afirmación, de modo que la locución se emplea —como en casi todas las áreas hispanohablantes— con el sentido de a propósito (grupo 12 en el § 30.13a), es decir, como introductor de una digresión, o bien como inciso que se sitúa en el interior de ese segmento para marcarlo como comentario marginal:

Todas son historias como de novela y es un llorar al final que ni los domingos en el cementerio. Por cierto, ya supe que estuviste con Carmen Ramos y que viste a Lucas Carrasco (Aguilar Camín, Error); La muchacha lo miró atónita. No era raro, por cierto, que su padre le propusiera cuestiones de doctrina (Ayala, Usurpadores).

30.12h Es frecuente que los adverbios o las locuciones adverbiales sean conectores discursivos en ciertas construcciones, pero no en otras. Así, ahora no es conector discursivo en Voy ahora mismo, pero sí lo es cuando significa ‘ahora bien’, como en Como médico he quedado bien. Ahora, personalmente, he tenido poco éxito (Baroja, Árbol). El adverbio encima tampoco lo es cuando denota lugar (§ 30.5), como en Puso las llaves encima de la mesa, pero sí cuando adquiere valor concesivo (§ 30.13e) y equivale a aun así, como en Le das todo lo que pide y encima se queja. El uso no deíctico de entonces al que se hace referencia en el § 17.9i (como en Entonces, ¿nos vamos?) también caracteriza a este adverbio como conector, a diferencia del empleo de esta partícula como adverbio demostrativo temporal. De manera análoga, bien modifica al verbo o al grupo verbal como hacen otros adverbios de modo (¿Lo harás bien?), pero es conector discursivo cuando expresa que se concede lo afirmado en el discurso precedente para introducir a continuación alguna información basada en él (como en Bien, ¿lo harás?). Otras veces, las locuciones adverbiales que funcionan como marcadores de discurso poseen la forma de grupos preposicionales que pueden ejercer diversas funciones sintácticas en otros contextos. Contrastan muy claramente en este sentido Con todo, estoy bastante contenta (donde aparece el adverbio de valor concesivo con todo, mencionado arriba) y Estoy bastante contenta con todo, donde con todo es un grupo preposicional en función de complemento del adjetivo. Existen otros muchos casos semejantes.

30.12i La mayor parte de los adverbios y las locuciones adverbiales que se usan como conectores discursivos orientan la manera en que la oración o el fragmento oracional sobre el que inciden han de ser interpretados en relación con el contexto precedente o con las inferencias que de él se obtienen. Desde el punto de vista formal, los adverbios y locuciones adverbiales que expresan relaciones supraoracionales se caracterizan por su relativa independencia fónica y sintáctica respecto de la oración. Como se ha explicado, es frecuente que aparezcan precedidos o seguidos de pausa, y también suelen formar grupo entonativo propio. Cuando se usan como incisos o como expresiones parentéticas, están sujetos a ciertas restricciones, que pueden ser generales o particulares. Entre las primeras, cabe resaltar el hecho de que estos conectores pueden separar el sujeto del predicado (La experiencia del viaje, con todo, resultó muy positiva) o los componentes del grupo verbal (La experiencia del viaje resultó, con todo, muy positiva), pero no, en general, los componentes de los grupos nominales que constituyen la oración (*La experiencia, con todo, del viaje resultó muy positiva). Entre las segundas, conviene señalar que las locuciones ahora bien, a saber, a propósito, así las cosas, es decir, es más, esto es o pues bien no aparecen en posición final de oración, mientras que desde luego, dicho sea de paso, más bien o por cierto pueden hacerlo sin dificultad, lo que se relaciona directamente con el grupo semántico al que pertenecen (§ 30.13a).

30.12j La independencia entonativa y la relativa libertad posicional acercan los adverbios mencionados a los oracionales. Recuérdese que también estos otros tienen independencia entonativa (Sinceramente, eso no me gusta) y cierta libertad posicional (Eso, sinceramente, no me gusta; Eso no me gusta, sinceramente), y que tampoco son, por lo general, focos de la negación o de otros operadores, como se vio en la sección precedente. Los adverbios oracionales funcionan en muchos contextos como elementos periféricos, al igual que los conectores discursivos adverbiales, pero se diferencian de ellos en que informan acerca de la manera en que debe interpretarse el con tenido proposicional de la oración, sobre la actitud del hablante hacia lo que dice o sobre su compromiso con los contenidos proposicionales manifestados. Los conectores discursivos adverbiales relacionan, por el contrario, estas últimas informaciones con el discurso en el que la oración está inserta. Atienden especialmente a las cadenas de razonamiento del hablante y, en general, a la línea argumentativa que este desea seguir. Es esperable, en consecuencia, que el análisis de los adverbios oracionales no esté tan estrechamente vinculado a la lexicología y la lexicografía como lo está el de estas otras partículas. Aun así, ciertos adverbios oracionales, sobre todo los evidenciales, están próximos a los conectores discursivos adverbiales, como se explicará en esta misma sección.

30.12k Los conectores discursivos adverbiales se pueden clasificar con dos criterios: su forma y su significado. El primer criterio se analizará en los § 30.12l y ss., y el segundo, en el § 30.13. Por las razones expuestas en la sección precedente, en esta presentación general solo será posible enumerar los grupos fundamentales de conectores adverbiales, presentar someramente ciertos rasgos generales que los caracterizan y mencionar algunas de las expresiones que corresponden a cada grupo. Atendiendo a su forma, cabe distinguir, ante todo, un grupo de conectores constituidos por adverbios, es decir, por elementos que no forman locuciones:

Adverbios simples: además, ahora, aparte, así, asimismo, bien, después, empero, incluso, luego, máxime, verbigracia, ya.

Adverbios terminados en -mente: consecuentemente, consiguientemente, evidentemente, igualmente, primeramente.

Adjetivos adverbializados: bueno, claro, mejor, primero, segundo.

Acerca de estos últimos, recuérdese el § 30.3. Se forma un segundo grupo de conectores discursivos con los que constituyen locuciones adverbiales. En los § 30.15-17 se presentará una clasificación de ellas en función de su estructura interna. Los conectores discursivos adverbiales pueden considerarse discontinuos o dependientes, si están en relación sintáctica con otros (de un lado… de otro…; primeramente…), o bien independientes, si no están restringidos de esa manera. La mayor parte pertenece a este segundo grupo.

30.12l Si se atiende únicamente a su constitución interna, se obtiene esta clasificación parcial de conectores discursivos adverbiales:

Construidos con complemento (expreso o tácito): además (de); al contrario (de); al contrario (que); al respecto (de); aparte (de); de resultas (de); encima (de).

Formados con la pauta «preposición + sustantivo»: a propósito; en cambio; en conclusión; en consecuencia; en definitiva; en efecto; en fin; en parte; en realidad; en resolución; en resumen; en síntesis; en suma; por añadidura (también de añadidura); por favor; por fin; sin duda; sin embargo.

Formados con la pauta «preposición + adjetivo o participio»: de hecho; en concreto; en particular; por cierto; por consiguiente; por descontado (o por de contado, variante ya poco usada); por supuesto; por último.

Formados con la pauta «preposición + pronombre o adverbio»: con todo
(también con todo y con eso, con todo y eso y con todo eso); desde luego; por ende; por tanto.

Formados con la pauta «preposición + infinitivo u oración de infinitivo»: a saber; para terminar; por decir algo.

Formados con la pauta «preposición + grupo nominal»: a fin de cuentas (también al final de cuenta, a final de cuenta, a final de cuentas); al contrario; al parecer; a todo esto; de todas formas (también de todos modos); en {cualquier ~ todo} caso; en {dos ~ otras ~ pocas} palabras; en el fondo; en {primer ~ segundo ~ último…} lugar; en {primera ~ segunda} instancia; en resumidas cuentas; en todo caso; en último término; por el contrario; por lo demás; por lo tanto; por lo visto.

30.12m Las oraciones subordinadas sustantivas pueden ser términos de preposición en los conectores discursivos adverbiales, como en encima de que te estuvimos esperando. Los adverbios además y aparte aceptan que el término de la preposición sea a su vez un grupo preposicional (además de para…; aparte de con…), mientras que los demás suelen rechazar esta construcción (*encima de para…). Sobre las secuencias de dos o más preposiciones, véase el § 29.5. Tal como se espera, no prescinden nunca de su complemento los conectores encabezados por locuciones preposicionales (§ 29.9), como a diferencia de o en vista de, entre otros. A resultas de pertenece a este último grupo, mientras que de resultas (de) —característico del español europeo— se comporta como locución adverbial y puede prescindir de su término, al igual que muchos adverbios: Se arremetían ambos con furia y se daban de lanzadas. De resultas caía derribado de la silla uno de los dos caballeros (Valera, Colores). Los adverbios en -mente admiten complementos preposicionales (con las restricciones que se analizarán en los § 30.14d y ss.), lo que permite que también en estos casos la expresión conectora sea un grupo sintáctico en lugar de un adverbio: Tampoco, consecuentemente con su escepticismo o su materialismo, no admiten valores morales válidos para todo tiempo y lugar (Salvador Hoy 30/1/1997).

30.12n Componen otro grupo de conectores discursivos adverbiales los formados a partir de expresiones no preposicionales:

Formados por adverbios: antes al contrario, antes bien, así pues (sin pausa entre ambas voces), así y todo, después de todo.

Formados por sustantivos o grupos nominales: hombre, otra cosa, una cosa más.

Formados por participios o construcciones absolutas: así las cosas, dicho esto, dicho lo cual, dicho sea de paso, no obstante (esto), visto lo cual, visto lo visto, etc.

Formados por gerundios: cambiando de tema, dejando eso de lado, hablando de otra cosa, resumiendo27.1m, n).

Algunas de estas fórmulas admiten variantes. Por ejemplo, la pauta dicho sea… da lugar a un gran número de expresiones, algunas semilexicalizadas: dicho en (o con) otros términos (también … de otro modo, … con otras palabras), dicho sea de paso, dicho sea sin ánimo de ofender, dicho sea con todos los respetos, dicho sea con perdón, dicho sea en honor a la verdad y otras muchas similares, a las que cabe agregar las formadas libremente con grupos adverbiales o preposicionales, como dicho sea todo ello con ánimo constructivo y sin la menor intención de molestar.

Información adicional

En relación con este capítulo, las siguientes entradas del Glosario de términos gramaticales podrían ser de su interés:
conector (discursivo), partícula

 

Nueva gramática de la lengua española
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