Sintaxis

25. El verbo (III). El modo

25.2 Inductores del modo

25.2a Es habitual dividir la información modal que expresa el verbo en dependiente e independiente de algún elemento inductor. Las oraciones no subordinadas se construyen por lo general en indicativo: Hoy es lunes; La abuela está cansada; Las elecciones se presentan reñidas. Si bien la mayor parte de los autores entienden que estos son casos de modo no seleccionado (en el sentido de que se usa el indicativo como modo por defecto o modo elegido en ausencia de inductor), opinan algunos gramáticos —tradicionales y modernos— que el modo indicativo también puede considerarse inducido en estos contextos, en cuanto que las oraciones independientes podrían entenderse como subordinadas a verbos tácitos como afirmar, expresar o manifestar, que seleccionan el indicativo.

25.2b El subjuntivo independiente o no subordinado está muy restringido en español. Uno de sus usos más característicos pone de manifiesto que la relación entre los verbos modales (§ 28.6) y la flexión modal es sumamente estrecha. Así, no muestra el comportamiento gramatical de las demás formas de subjuntivo el pretérito imperfecto de algunos auxiliares modales que dan lugar a alternancias del tipo cantara ~ cantase. Se trata de las formas debiera, pudiera o quisiera, que no alternan con las variantes en -se en oraciones como Debiera estar allí a las ocho; Pudiera ser que estuviera equivocado; Quisiera pedirte un favor24.2c, n, ñ). También hubiera cantado24.2s-v) pertenece a este paradigma. Cuando esas formas aparecen en oraciones subordinadas a verbos que seleccionan indicativo, como en Me parece que debiéramos marcharnos o en Yo muchas veces he pensado que hubiera preferido verle muerto a contemplar lo que ha llegado a ser (Ortiz, L., Luz), no están inducidas por estos predicados, puesto que pueden usarse igualmente en oraciones principales. La forma hubiera cantado alterna a menudo con habría cantado en oraciones como Me {habría ~ hubiera} gustado participar. Alterna asimismo con el infinitivo en expresiones contrafácticas (§ 42.3s y 47.8h) del tipo de Hubieras estado aquí ~ Haber estado aquí, que se analizan en el § 24.2v. Por oposición al punto de vista que se adoptará en este capítulo, algunos gramáticos entienden que, al mostrar esas formas de subjuntivo comportamientos propios de las de indicativo, deberían inscribirse en este último paradigma, en lugar de entre las del subjuntivo.

25.2c Los usos del subjuntivo no subordinado que se acaban de ilustrar muestran que existe una relación estrecha entre los conceptos de verbo auxiliar modal y flexión verbal modal. Esa relación se extiende a otros casos. Así, en algunos contextos en los que se espera subjuntivo, este modo alterna con auxiliares modales de obligación construidos en indicativo. Ilustran esta pauta los complementos de los verbos que expresan mandato:

Estamos ya en noviembre y la gerencia no ordena que debemos quedarnos una o dos horas más para recuperarlo (Hoy [Chile] 8/11/1978); Le ordenaba que tenía que caminar más de prisa (Azuela, A., Casa); Nos dijo que debíamos prepararnos para ir a la ciudad de La Serena (Araya, Luna).

En ausencia del verbo auxiliar, en el penúltimo ejemplo se diría Le ordenaba que caminara y, en el último, Nos dijo que nos preparáramos, con subjuntivo en ambos casos. Análogamente, en el primer ejemplo de esta serie debemos (indicativo) quedarnos equivale de manera aproximada a nos quedemos.

25.2d Se obtiene también la pauta contraria a la descrita en el apartado anterior. Así, en ciertos contextos (sin negación en la oración principal) en los que se espera indicativo, se encuentran a veces auxiliares modales en subjuntivo, incluso con correferencia de persona, como en Yo pienso que pueda hablar de mí mismo sin sentir ningún entusiasmo egotista, físico o intelectual (Baroja, Vuelta), donde no se hubiera dicho seguramente Yo pienso que hable de mí mismo…, o en Lloro al pensar que pueda ser cierto (Somoza, Caverna), que para muchos hispanohablantes resulta más natural que Lloro al pensar que sea cierto. Como se ve, la presencia del subjuntivo en estos ejemplos está en función de la de un auxiliar modal. De igual manera, tras supuse se espera indicativo, pero repárese en que aparece el subjuntivo en Se dedicaba a un ejercicio de memoria que por entonces supuse que pudiera ser remedio pasajero contra el pánico (Mutis, Maqroll), ya que —como se ha observado— la forma verbal pudiera puede usarse en contextos no subordinados, al igual que los tiempos del modo indicativo.

25.2e Como se expone con detalle en los § 42.4 y 42.5, se emplea el subjuntivo no subordinado en un gran número de oraciones desiderativas, a veces lexicalizadas o semilexicalizadas. Unas se forman sin la conjunción que (Dios lo acoja en su seno; Maldito seas; En gloria esté; El cielo te oiga; Usted lo pase bienla pase bien en algunos países—) y otras con ella (Que te vaya bien; Que te diviertas; Que sea para bien; Que se muera; Que te mejores; Que me caiga muerto si no es verdad lo que digo). Se explica en los § 42.4e y ss. por qué es polémica la cuestión de si han de reconocerse como oraciones imperativas las que presentan el verbo en tercera persona (Hágase la luz; Agítese antes de usarlo; Sea un espacio de ene dimensiones en el que…). Las oraciones disyuntivas de interpretación concesiva construidas con subjuntivo independiente, como Quieras o no, se analizan en los § 47.16f y ss. Las oraciones de sentido final introducidas por no sea que…, no fuera que… o no vaya a ser que… se estudian en los § 46.7i y ss.

25.2f Suele llamarse modo dependiente al que está inducido por algún elemento gramatical. Si bien el modo dependiente por antonomasia es el subjuntivo, son asimismo numerosos los contextos de subordinación en los que se impone el indicativo. Se describen los fundamentales en los § 25.3c-i. Los principales contextos de modo dependiente son las oraciones subordinadas, sean sustantivas (Me alegra que estés aquí), adjetivas (Leeré todo lo que escribas) o adverbiales (si no está usted de acuerdo). Aun así, dado que el concepto de ‘subordinación adverbial’ es hoy sumamente polémico (§ 1.13p y ss.), este capítulo no contiene ninguna sección dedicada al modo en las subordinadas adverbiales. Se analiza, en cambio, en dos de ellas (§ 25.13 y 25.14) el modo en los contextos introducidos por ciertas partículas.

25.2g El modo dependiente está determinado por algún inductor. Para facilitar la exposición, se marcarán en este capítulo los inductores modales con trazo discontinuo y se usará el subrayado continuo para identificar las formas verbales que contienen flexión modal inducida por los primeros, como en Desea que la dejemos en paz. Son inductores del modo los verbos, como en Ya veo que no {está ~ *esté} usted bien; los adjetivos, como en Estoy cansado de que todo le {*parece ~ parezca} mal; los sustantivos, como en Tiene la sensación de que no la {comprenden ~ *comprendan}, y los adverbios, como en antes de que {*sabe ~ sepa} el resultado o en Me parece bien que {*practica ~ practique} más. También son inductores algunas preposiciones, como en sin que la muchacha {*tenía ~ tuviera} conocimiento de ello o en para que {*estás ~ estés} contenta. Sobre la posibilidad de entender o no las estructuras del tipo «preposición + que» como conjunciones subordinantes, véanse los § 46.2a y ss. Son asimismo inductores del modo algunas conjunciones y locuciones conjuntivas, como en vez de que nos {*llama ~ llame} usted o a Ón de que se {*recupera ~ recupere} pronto.

25.2h Figuran entre los inductores modales, especialmente del subjuntivo, una serie de elementos que suelen representar modalidades oracionales. El más destacado de ellos es la negación, como en No veo que aprecies mi explicación, que contrasta con Veo que {desprecias ~ *desprecies} mi explicación. Se dedicará el § 25.7 a analizar la relación que existe entre negación y modo. También pertenece a ese paradigma de inductores la interrogación, como en ¿Cuál cree que vaya a ser la siguiente estrategia del Führer? (Volpi, Klingsor), en este caso en alternancia con el indicativo. En contextos más restringidos es asimismo inductor del subjuntivo la exclamación, como en ¡Quién estuviera allí para verlo!, que contrasta con la variante anómala *Él estuviera allí para verlo. En las oraciones desiderativas son inductores los adverbios exclamativos ojalá (¡Ojalá llegue a tiempo!) y así (¡Así se muera!), que se estudian en los § 42.4e y ss. Estas partículas tienen propiedades en común con las interjecciones, como se indica en los § 32.5o y ss. Algunos gramáticos llaman a las manifestaciones del subjuntivo inducido por la negación o la interrogación subjuntivo de polaridad. Se estudiarán estas construcciones en los § 25.7, 25.8a, 25.11q, 25.12 y 25.13v. Se verá allí que las características gramaticales de la inducción modal, en casos como el citado No veo que aprecies mi explicación, son considerablemente diferentes de las que poseen oraciones como Quiero que aprecies mi explicación y otras similares en las que el inductor es un elemento predicativo.

25.2i Se ha observado que otras manifestaciones de la flexión verbal pueden constituir inductores del modo en contextos restringidos. El gerundio es un inductor del subjuntivo con los predicados aceptar, admitir, dar por bueno, imaginar, suponer y otros similares que expresan estados hipotéticos, como en En suma, suponiendo que exista equilibrio en el comercio global de los sectores involucrados, se presenta un potencial significativo en el comercio de Perú con Mercosur (Fairlie, Relaciones), donde se admite también el indicativo. Con los verbos mencionados pueden ser asimismo inductores del subjuntivo los imperativos, lo que sugiere que, en ciertos casos, un tipo de modo puede constituir un entorno adecuado para inducir la presencia de otro:

Imagínate que te hagan daño, que nunca más puedas tener hijos... (Azuela, A., Casa); Supongamos que sea como usted dice, respondo, sin comprometerme (Tomeo, Amado).

Es importante resaltar que el modo subjuntivo puede ser compatible en estos contextos con el indicativo, unas veces con cambios de significación y otras sin ellos. Se dedicarán tres secciones de este capítulo (§ 25.4-6) a estos hechos.

25.2j Los adverbios mencionados en el § 25.2g inducen el modo en el interior de alguna oración subordinada a la que no pertenecen. Lo hacen, pues, desde una posición externa a ella, al igual que otros elementos predicativos. Lo característico de los adverbios de duda (§ 25.14i-ñ y 30.11i y ss.) es que son capaces de inducir el modo en oraciones no subordinadas, como en Tal vez recuerde usted lo que ocurrió, donde se admite también el indicativo con una ligera diferencia de significado que se analiza en el § 25.14k. El mismo tipo de contexto sintáctico caracteriza a ciertos adverbios que expresan posibilidad y son inductores del subjuntivo en oraciones como Posiblemente se trate de dos fotografías hechas el mismo día en el mismo lugar (Mendoza, Verdad), asimismo en alternancia con el indicativo. Si bien se identifican a veces en la tradición los conceptos de modo dependiente y modo subordinado, no son, como se ve, equivalentes, ya que, como se muestra en este apartado, existen oraciones no subordinadas en las que la presencia del modo subjuntivo se debe al efecto de algún inductor.

25.2k Existe relación semántica entre los inductores que se mencionan en este apartado y los que se mencionaron en los anteriores. Así, el verbo dudar induce el subjuntivo en la subordinada sustantiva de su complemento de régimen, como en Dudo mucho de que alguna vez accedamos a la verdadera historia de la verdadera humanidad (Cortázar, Rayuela). Véase el § 25.7n para algunas excepciones. Los adverbios de duda acaso, quizá y tal vez no imponen siempre el subjuntivo. De hecho, solo lo inducen desde la posición preverbal, como en Quizá vaya (Baroja, Aurora). Véase sobre este mismo punto el § 25.14i. El adverbio ojalá, en cambio, mencionado en el § 25.2h, no permite la alternancia con el indicativo. En el caso del verbo dudar, la construcción contiene un predicado que determina la presencia del subjuntivo en su complemento oracional; en el de los adverbios, no hay oración subordinada, pero los adverbios de duda se asocian con la modalidad epistémica (§ 28.6a), al igual que los de posibilidad, lo que permite que induzcan el modo subjuntivo.

25.2l En los apartados anteriores se explicó que el inductor del modo subjuntivo puede ser interno o externo a la oración en la que aquel aparece. El modo subjuntivo en las oraciones de relativo está inducido también por algún elemento, que puede ser igualmente interno o externo al grupo nominal. Entre los inductores internos están los indefinidos negativos, como en nadie que sepa informática, ningún compañero con el que yo haya trabajado, si bien en algunas de estas oraciones se admite el indicativo, como se verá en los § 25.10q-r y 25.11n. Se estudian otros inductores internos, poco numerosos, en los § 25.9b, 25.11o y 25.14i-n. Los inductores externos son, en cambio, muy abundantes y coinciden casi por completo con los que dan lugar a la interpretación inespecífica de los grupos nominales indefinidos, descritos en el § 15.10: los llamados verbos intensionales (buscar, elegir, necesitar, querer y otros similares), como en Busco un diccionario que me sirva (cf. Tengo un diccionario que me {sirve ~ *sirva}), y en general los contextos prospectivos (Dile algo que le guste; Te arrepentirás de lo que digas; en caso de comprar una computadora que sea más rápida) y los genéricos (el que no tiene quien le ayude; o bien La gente se compra cosas que sean útiles), con algunas restricciones que se examinarán en los § 25.10p-t y 25.14e. En todos estos casos se admite también el indicativo, con las diferencias de significado que se analizarán en los § 25.9-11.

25.2m Los inductores del subjuntivo que se asocian con alguna modalidad oracional (capítulo 42) —o, en general, con un operador modal— ejercen su función tanto en las oraciones sustantivas como en las relativas. Así, la interrogación es el elemento inductor del modo subjuntivo en ¿Ves algo que te guste?, con subordinada relativa (cf. *Veo algo que me guste), pero también lo es en ¿Observaste que dijera algo nuevo?, con subordinada sustantiva (cf. *Observé que dijera algo nuevo). Como en los apartados anteriores, el hecho de que en muchas de estas oraciones se admita también el indicativo no obsta para que el subjuntivo siga necesitando en ellas de algún inductor. El adverbio solo, de significado próximo a la negación, como se explica en los § 40.9 y 48.6k, induce el subjuntivo en Solo tiene un amigo que sea verdaderamente inteligente (con relativa), que contrasta de forma marcada con *Tiene un amigo que sea verdaderamente inteligente. Lo induce asimismo en Solo una vez vi que se esforzara (con sustantiva), que contrasta en la misma medida con *Una vez vi que se esforzara. Lo mismo sucede con el cuantificador poco19.5), que induce el modo en Poca gente tiene un amigo que sea fiel, que contrasta con *Mucha gente tiene un amigo que sea fiel. Todos estos inductores del modo se analizarán a lo largo del presente capítulo.

25.2n Se ha debatido en numerosas ocasiones la cuestión de si la flexión verbal de modo es siempre informativa. Cuando existe alternancia modal, se obtiene en casi todos los casos alguna diferencia de significado, como en lo que tú {digas ~ dices} o en aunque no {estoy ~ esté} de acuerdo. No obstante, los contextos en los que no se da tal alternancia son polémicos desde el punto de vista de la cuestión que se suscita en este apartado. Así, unos autores entienden que el modo subjuntivo —a diferencia del tiempo verbal— no aporta información alguna en oraciones como Le pedí que me escribiera. Al rechazar la gramática el indicativo en ese contexto (*Le pedí que me escribía), la presencia del subjuntivo sería análoga a la de un morfema concordante, es decir, a la de un elemento gramatical vacío de contenido e impuesto por la sintaxis. Otros autores entienden, por el contrario, que el modo es informativo en alguna medida también en estos contextos, de manera análoga a como lo son muchas de las preposiciones que introducen los complementos de régimen verbal, a pesar de que a menudo no son elementos potestativos u opcionales. En efecto, se explica en el § 36.1i que las preposiciones regidas introducen muchas veces informaciones semánticas presentes en los predicados que las seleccionan. Esta presencia es a veces morfológica y puede presentar cierto grado de redundancia, como en colaborar con ellos. Cabe pensar que la medida en que pueda considerarse informativa la aportación semántica de la preposición con en casos como este es relativamente similar al grado en que el subjuntivo no alternante pue de considerarse también informativo. Existen otras analogías entre rección preposicional e inducción modal.

Información adicional

En relación con este capítulo, la siguiente entrada del Glosario de términos gramaticales podría ser de su interés:
oración (de modalidad) desiderativa

 

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